Hoy nos toca hablar de las capacidades a la hora de tomar decisiones del actual técnico del equipo Nacional, y del mejor jugador de la historia del deporte que nos apasiona. Estamos de acuerdo que la clasificación de la selección al mundial de Sudáfrica, no fue abultada como siempre se espera del equipo nacional, esta claro que su futbol, el futbol que mostró no fue de alto vuelo, que se sufrió por demás, y hasta corrimos riesgo de clasificar. Esta claro también que hubo ocasiones extra futbolísticas que no ayudaron a evolucionar. Todo esto pesa a la hora de abordar un análisis preciso sobre las condiciones de cualquier Director Técnico.
Muchos piensan que hay un Diego jugador, y un Diego Director Técnico, que el 10 era una persona cuando pisaba el verde césped y hoy es otra sentado en el banco dando indicaciones. Pareciera que tiene dos personalidades diferentes, que su perfil es dual, que antes era de una manera y hoy en el banco de otra. Definitivamente esa forma de abordar el análisis, desde mi perspectiva es totalmente errónea.
Si hay algo que caracterizó a Diego a lo largo de su trayectoria como futbolista, además de sus capacidades técnicas, de su interminable calidad, y sus destellos de apiladas mágicas, fueron sus decisiones. Si, lo que están leyendo, sus decisiones.
Cuando estaba frente a la pelota, Diego siempre tomaba la determinación correcta, hacía lo que pedía la jugada, tenia una capacidad superior a la de otros jugadores en ese sentido, a la hora de decidir que hacer, optaba por lo mejor, sea cual fuere el momento, en una definición o en un amistoso, a el nunca le pesaba.
Hoy ya sin los cortos puestos, sin la diez en la espalda, sin los rivales tratando de encontrar la manera de pararlo, Diego sigue demostrando que su capacidad de decisión esta intacta, que como lo hizo siempre, habitualmente opta por la mejor alternativa.
Analicemos más en detalle de que estamos hablando. Todo empezó en aquel partido contra Perú, Diego decidió convocar al Pipa Higuain por primera vez, y más aún ponerlo de titular, toda una decisión arriesgada, si se tiene en cuenta que Gonzalo no había jugado nunca un partido oficial con la selección mayor. Como sabemos Gonzalo fue el autor del primero de los dos goles que ayudaron a conseguir aquel agónico triunfo. También en aquel encuentro convocó a Pablito Aimar, jugador que no era citado a la selección hacia mucho tiempo, jugador que no había participado en el ciclo anterior, el de Basile, y que tampoco lo había hecho en el inicio de la era Maradona. Optó por ponerlo en el 11 inicial y el le respondió, fue el autor de la asistencia para el gol de Pipita. A esos dos jugadores “nuevos” en el equipo hay que agregarle la citación a San Palermo, criticada por muchos al igual que la de Aimar, pero no por eso no justificada. Faltando minutos para terminar el partido contra Perú, Diego lo mandó a la cancha y fue Martín, el interminable goleador, el que nos dió el triunfo a lo Gareca en la eliminatoria del mundial 86, poniendo el agónico 2-1 bajo la torrencial lluvia desatada en el estadio Monumental, a segundos del final (Tras centro del Pocho Insua, otra decisión de Maradona).-
En la fecha siguiente de las eliminatorias, Argentina fue a buscar la clasificación a Uruguay, al siempre difícil estadio Centenario. En esa ocasión Diego opto por un sistema mas defensivo y plagado de gente en el medio, todos sabíamos que iba a ser una batalla, que no se iba a poder “jugar lindo”, y Diego también lo supo (fue el primero en saberlo). Le salio perfecto, fue 1 a 0, con aquel lejano 4-4-2, y clasificación abrochada por la selección. Recordemos también que en aquel épico partido contra los Charrúas, Diego tomo la decisión de poner en el segundo tiempo a Mario Bolatti, la hinchada uruguaya lo tildaba de “cagon”, pero como su historia lo indica, fue el mismo Diego quien salió victorioso ante la hinchada charrua, ya que el mismo Bolatti fue el autor del 1-0 a favor de argentina (seria el resultado final).
Una vez consumada la clasificación a la copa del Mundo, Diego no paro un segundo de trabajar, optó por elegir a la Universidad de Pretoria (con el asesoramiento de Bilardo) como predio para que nuestro equipo se aloje en Sudáfrica, cosa no poco relevante, si se tiene en cuenta las ventajas de la ubicación geográfica, tiempo de viaje, comodidades para los jugadores, practicidad para el trabajo, etc.
Luego, contrariamente a lo que hicieron la mayoría de los entrenadores de las selecciones, Diego decidió no jugar amistosos previos (esta bien, muchos dirán que por algunas cuestiones políticas no se dio, pero la decisión final fue de el), prefirió preocuparse por el descanso de sus jugadores, entendiendo lo que ellos necesitaban, ya que venían de una temporada plagada de partidos en los clubes, y elemento que podía pagarse con lesiones, como ocurrió con grandes figuras, como Pirlo, Drogba, Robben, etc. Se encargó también del factor humano del equipo, de los aspectos emocionales, de protegerlos, de darles afecto, de respaldarlos siempre. Punto para el Diez en esa elección.
Hablando ya en el aspecto estrictamente futbolístico, mandó un mensaje a todos los que lo criticaban por sus capacidades técnicas como Seleccionador, demostró que esta a la altura que las circunstancias ameriten.
Salio a jugar la Copa del Mundo con un cambio el sistema de juego y optó por un 3-4-3 o 4-3-3, arriesgando como cuando era jugador, según las circunstancias del partido, dándole lugar a Carlos Tevez, y poniendo así un delantero mas, otro socio para la Pulga Messi, que debía estar bien rodeado, un hombre mas para el sacrificio y otro misil en el aspecto ofensivo, cosa que dio grandes resultados. También le dio su crédito al Gringo Heinze, en duda por muchos (nos referimos a periodistas e hinchas, nunca para él), pero quien pagó con gol y gran firmeza defensiva (se puede decir que el defensor mas sólido en los primeros dos partidos).
En ese partido del debut, Maradona interpreto a la perfección lo que pedían las circunstancias, y al momento de hacer los cambios acertó en todos los aspectos, asimiló la flaqueza en el sector derecho del equipo, sobre todo en el puesto de Jonás, que no hacia pie en el mano a mano, fue entonces que mandó a la cancha a Burdisso para ocupar ese lugar, Gutiérrez al lugar de Di María de flojo partido (pero de mucho desgaste), para volantear, Maxi por Verón para tener el recorrido de un 8 clásico en ese sector y así no tener filtraciones por ese costado, y Milito en lugar de Higuain, para apostar por frescura ofensiva, con alguien de características similares. Cambios lógicos, y con buenos resultados, el equipo se asentó y se pudo cerrar el partido.
Para la segunda fecha, con Corea como rival y con un Verón entre algodones, Diego puso a Maxi por derecha, que cumplió con lo pedido, banco a Higuain a pesar de haber estado errático en el partido anterior y respondió con un triplete, no arriesgo a Samuel ante una molestia y puso sin dudar a Burdisso, que además de estar firme atrás, peino la pelota en el primer gol de Higuain. Luego mandó a la cancha al Kun (criticado por ser su yerno, esplendido trabajo aquí del cuerpo técnico al visualizar el cambio), en lugar de un Carlitos extenuado, Agüero justificó con creces la elección del DT, desequilibró y jugo un enorme partido. Finalmente puso a Bolatti por Higuain (de fantástica actuación), adentro un 5 en lugar del 9, un hombre más al medio para cerrar el partido.
Contrariamente a lo que todos decían, Diego respondió con grandes decisiones en los momentos indicados, demostró que las pelotas paradas son prioridad en su trabajo, demostró flexibilidad en los cambios, y adaptabilidad a las circunstancias del partido.
A todo esto le podemos sumar la decisión de darle el arco a Romero, apuesta fuerte y con grandes réditos, de darle la 9 al Pipa, hombre que no había sido citado hasta el momento, de devolverle la participación en el seleccionado a Samuel, hombre TOP en el mundo del futbol defensivo, y la de llevar 6 delanteros a Sudáfrica, 5 ya jugaron y cumplieron, el único que falta es Palermo.
Es obvio que podemos criticar un montón de cosas, que podemos concluir en que hay aspectos en los que no optó por lo mejor (Caso Zanetti y Cambiasso para poner un ejemplo), pero de lo que no podemos dudar es que hasta el momento todo le ha salido bien.
Estemos tranquilos señores, Diego es el mismo (aquel que no conoce el miedo y el ridículo, es por eso que nunca le peso una decisión), y su capacidad esta intacta, esperemos que la decisión final la tome el 11 de julio, que sea en el horario de las 15,30 y que podamos brindar por Argentina campeón.-